Carrefour Scan & Go

Hace unos días, al realizar la compra en un centro Carrefour, me dio por probar el sistema que ellos denominan Scan & Go.

Se trata de emplear un lector de códigos de barras (fabricado por Motorola), que puedes apoyar en un soporte que lleva el propio carro de la compra, mediante el cual cada producto que compras lo escaneas conociendo su precio y el montante total de tu compra (va sumando cada producto que escaneas).

Ya había visto a gente utilizar este sistema para realizar su compra pero, como ese día tenía tiempo, me acerqué al puesto de información que tienen al lado de los lectores. La mujer que me atendió me comentó que necesitaba mi tarjeta club Carrefour y aceptar una serie de condiciones al tratarse de la primera vez que realizaba mi compra usando ese sistema.

Una vez solventado ese trámite, el procedimiento es tan simple como pasar la tarjeta club por un escáner y, automáticamente, se iluminará una luz al lado del lector que te asignan. Ya puedes situarlo en el soporte del carro y empezar tu compra.

Comentar que el lector tiene una serie de botones siendo el principal el de escaneo, otros dos para moverte arriba y abajo en la lista de productos escaneados, otro para borrar artículos (si lo has escaneado y decides que no te hace falta) y un cuarto para obtener información del producto que acabas de escanear.

Impresiones

• el procedimiento, que a priori parecía interesante, es aburrido: tienes que escanear cada producto que compras y, si te llevas más de una unidad del mismo artículo, escanear cada una de ellas (o tantas veces uno como unidades compras).
• el lector funciona perfectamente salvo cuando te encuentras con códigos de barras doblados que tienes que «adecentar» para que el lector pueda leerlo. Otras veces, el código de barras es diminuto y tienes que «apuntar» minuciosamente.
• tanto escaneo de artículos y preguntas del tipo ¿he escaneado éste o lo he dejado en el carro sin escanear? te distraen de tu principal objetivo: hacer la compra. Esto, al final, puede suponer que te dejes más de un artículo sin comprar.

Una vez hecha la compra, no te diriges a la típica caja de gran superficie que todos conoces sino que hay una serie de cajas especiales para usuarios de Scan & Go. Allí, y según he podido leer en otro blog (cuyas análisis es más profundo que el mío), un sistema informático, de manera aleatoria, decide si un empleadorevisa tu compra o si, por el contrario, puedes proceder al pago.

El proceso de pago supone que debes «descargar» la información de tu lector en un escáner especial; es una pantalla (situada encima del escáner) la que te dice si tu compra debe ser revisada o si puedes proceder al pago (introducir tu tarjeta de crédito, etc.).

En mi caso, tocó revisión (personalmente, no me creo esa supuesta aletoriedad del sistema ni que Carrefour presuponga la buena fe del cliente) y, la persona que me atendió, empezó a escanear, de nuevo, ¡producto tras producto! (os puedo asegurar que el carro iba casi lleno). Cierto es que no tuvo que escanear todos pero no encontró nada anormal y, la pérdida de tiempo que me supuso, fue la gota que colmó el vaso: no creo que repita la experiencia.

Ya para terminar, tampoco tienes donde apoyar los productos (permanecen en el carro) para meterlos en bolsas. El resultado final fue llevarse el carro con la compra por todo el parking y, ya en el coche, meter la compra en bolsas.

Si algún día optáis por este sistema, comentadnos que os ha parecido.

(Pablo)